Los segundos siguen corriendo.

Tú no te detienes.

Dentro de mí corren ríos de sentimientos, que se incrustan en el mar de mis deseos.

El tiempo no se detendrá, mis ríos desaparecerán.

Tú seguirás, como quien va contra la corriente.

Los segundos no me dicen nada, podría descifrarlos, los minutos caminan inquietos. Los sentimientos se cruzan confusos y resentidos, con ideas que van y vienen. Y los recuerdos entonces parecen desaparecer de este lugar escondido, y nuevos recuerdos toman su lugar.